miércoles, 10 de febrero de 2010

CONDICIONES

No hables, no trates de cambiar mi mente, mis ideas. No trates tampoco de comprarlas, no son algo que puedes obtener fácilmente, con sólo mirarme, con solo comprarme un ramo de rosas marchitas; no son un objeto de tu decisión.

No vale la pena seguir sintiéndome tan solitariamente completo en este espacio sin dolor, si sólo pretendes estar en soledad con migo. Tus palabras me centran al mismo tiempo que me quitan ese aliento de vino que escurre por mis labios sin estar seco todavía. No quieras sentir mis labios, sino vas a limpiar la gota borgoña que cae por la comisura de ellos. Prefiero una servilleta.

No toques mis manos si no vas a hacer latir mi corazón, si sólo fuera una mentira estaría completo, pero sé que no es nada más que un simple boceto de tu tiranía hacia mi corazón. Sólo quiero ser yo mismo, dejarme llevar por tus ocasos de soles que no nacen, y así, si tal vez todo sale como espero, poder sentir tu corazón latiendo junto a los recuerdos de los míos.

No esperes que te de las gracias por hacer de cuenta que me amas. No quieras mentirme con esos ojos amarillos de envidia, no quieras cambiar mi color de azul a verde, intercambio facetas de tu personalidad errante. Si algo debo agradecer ahora es justamente esa necesidad de vos, ese deseo irrepetible que me pide a gritos que te quite la sonrisa con un beso mío.

1 comentario:

  1. genial.
    me gustó mucho más que el anterior, obviamente en este si le pusiste pilapila con TUS sentimientos.
    great (Y

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